Desde muy chica soñé vivir en un mundo donde las fantasías vividas frente a un espejo, mi mejor amigo en ese entonces, se hicieran realidad, y así fui creciendo, cantando, bailando y soñando con un mundo que parecía ajeno y que pertenecía sólo a los demás.
Tomé clases de Danza y logré expresarme corporalmente durante mi infancia, siempre sabiendo hacia donde ir.
En 1998 asistí a mi primer clase de Teatro, con Enrique Guevara, y descubrí que ese es el mundo al cual pertenezco y debo pertenecer.
Mis segundos maestros fueron Germán Aquis y Raúl Baroni, que me enseñaron mucho acerca del Teatro, y de la vida.
También hice Clown junto a los grandes Leticia Torres y Mariano Alonso.
Actualmente, desde hace unos años, mi entrenadora es Lucila Eliascher, a la cual le debo gran parte de lo que soy.
Y así sigo creciendo, aprendiendo y aprovechando cada oportunidad que encuentro... y que busco a cada paso.
Con la convicción de que: SI NO FUERA ACTRIZ, ¿QUÉ OTRA COSA PODRÍA SER? NADA.